Caso Investigaciones Privadas
Un inspector municipal de Hialeah que varias veces se había reportado enfermo para atender su propio negocio de mantenimiento de piscinas fue despedido, dijo el martes el alcalde Carlos Hernández.
Mario Figueredo, que llevaba siete años en el Departamento de Licencias, fue despedido por Hernández basado en una investigación realizada por detectives privados contratados por la Ciudad de Hialeah.
Hernández indicó que Figueredo empezó a ser seguido y filmado por los detectives tras sus constantes ausencias por supuestos “dolores de espalda”. Sin embargo, los detectives comprobaron que se iba a trabajar a su negocio privado.
“Empezamos a sospechar de él porque no venía al trabajo y decía que estaba mal de la espalda”, dijo Hernández. “Se investigó y comprobamos que no era verdad. El realizaba un trabajo físico de limpieza de piscinas para beneficio propio lo que dejaba en claro que no tenía problemas de salud”.
Hernández criticó que Figueredo se hubiera acostumbrado a sacar provecho de los beneficios médicos y no cumpliera con sus funciones como inspector.
“El trabajaba aquí por el seguro médico”, dijo. “Pero se olvidó de que aquí estamos para servir a los ciudadanos, no para aprovecharnos de ellos”.
El martes, Hernández continuó rehusando identificar la empresa de detectives contratada y el costo de sus servicios.
“Estamos hablando de no mucho dinero”, dijo Hernández. “Lo importante aquí es saber cuántos miles de dólares le estaban robando estas personas a los ciudadanos de Hialeah al no hacer su trabajo”.
Agregó que su administración no tenía nada que ocultar y que esa información no era tan importante para él.
Darío Moreno, profesor de Ciencias Políticas de la Universidad Internacional de Florida (FIU) y experto en administración pública, dijo que los ciudadanos tienen derecho a saber el nombre de la empresa de detectives privados debido a que sus servicios fueron pagados con fondos públicos.
“Creo que es importante que esta información se dé a conocer”, dijo Moreno. “El público tiene derecho a conocer qué empresa fue contratada y cuánto dinero se invirtió”.
Figueredo es el tercer empleado despedido en menos de un mes tras las investigaciones encargadas a los detectives privados.
El 16 de abril, fueron despedidos Maritza Martínez y Carlos Rodríguez, empleados del Departamento de Agua y Alcantarillado (DAA), quienes en varias oportunidades fueron filmados cuando se iban de compras en horas de trabajo en un camión para la destupición de alcantarillados.
Durante una rueda de empresa en la sede de la alcaldía, Hernández mostró partes de un video filmado el jueves 26 de enero en el cual se observa a ambos empleados ingresar al supermercado Sedano, del 3950 de la avenida 12 del oeste. Luego de 20 minutos, Martínez salió con un carrito lleno de bolsas y, acompañada por Rodríguez, condujo el camión municipal hasta su casa para dejar la compra.
“Ellos estaban haciendo cosas personales en su tiempo de trabajo”, dijo Hernández. “Para mí eso es una falta de respeto a los ciudadanos y trabajadores de esta ciudad”.
Martínez ha dicho que fue víctima de una represalia política por haber apoyado al ex alcalde Raúl Martínez, quien compitió contra Hernández, en las elecciones municipales de noviembre.
Durante los últimos meses, al menos cuatro empleados que apoyaron la campaña de Raúl Martínez han sido investigados o despedidos bajo diversas circunstancias.